Chávez sigue vivo en el corazón de cada revolucionario

La Revolución Bolivariana fue posible gracias a la figura y liderazgo del presidente Hugo Chávez Frías, quien impulsó un proceso de cambio democrático y pacífico que ha impactado en todos los ámbitos de la vida nacional. Su liderazgo contribuyó a elevar la calidad de vida individual y colectiva, a garantizar la democracia participativa y su pensamiento es hoy referencia y guía para los países de América Latina y el Caribe.

En la continuación del ciclo de foros Chávez siempre presente y para disertar sobre el legado del jefe de la Revolución Bolivariana, estuvieron este miércoles 12 de marzo en la plaza Juan Pedro López del Banco Central de Venezuela (BCV) el presidente del instituto emisor, Nelson Merentes; Argenis Chávez, hermano del Comandante eterno, y Noel Zamudia, amigo de la familia Chávez.

En sus palabras de bienvenida al conversatorio, Merentes recordó al Chávez preso en Yare y su pensamiento libertario; al Chávez candidato presidencial, quien recorrió el país con mínimos recursos, y al  líder convertido en esperanza, “y que donde quiera que fuera era un mar de sabiduría”, aseguró. Asimismo, reflexionó acerca de la ausencia del Comandante, que considera solo física, “porque nos dejó su pensamiento, un pensamiento que sigue vivo”.

Noel Zamudia, por su parte, declaró a Venezuela territorio liberado por Chávez y su liderazgo. “Él representa el crisol de todo lo bueno”, sentenció.

Tras este preámbulo hizo uso de la palabra Argenis Chávez, quien para empezar entonó una estrofa de “Lucerito de mi llano”, del compositor venezolano Eneas Perdomo, una de las piezas favoritas del Presidente que  emocionó a los asistentes.

El hermano menor del líder bolivariano relató eventos importantes de la vida del “Comandante de acero, el Comandante eterno”, desde su infancia hasta aquel 4 de febrero de 1992, cuando protagonizó la rebelión militar que inició el camino de la Revolución y marcó el sendero que debe seguir la patria después de su desaparición física. “58 segundos le bastaron a Hugo para despejar muchas dudas de lo que era esa rebelión militar. Con sus palabras demostró claridad y que no se estaba improvisando”.

Rememoró los orígenes de su familia, a su inolvidable abuela Rosa Inés, a quien declaró “abuela de todos los venezolanos”. Señaló que la familia fue su primera escuela: “Una familia humilde, muy unida”.

Argenis Chávez recordó que su hermano Hugo cumplió todos sus compromisos con el pueblo venezolano, desde su primera promesa, representada por el proceso nacional constituyente, que echó a un lado el antiguo modelo represivo por uno inclusivo, popular, protagónico y participativo.

Aseguró que al principio la oligarquía pensó que podía dominar a Chávez, pero rápidamente se dio cuenta  de que “él no iba a traicionar a los más humildes, que no iba a traicionar a su pueblo”.

Hizo un recuento de los logros sociales, económicos y políticos alcanzados durante los 14 años que el Comandante Supremo dirigió al país y que hoy continúan bajo la dirección del presidente Nicolás Maduro. Destacó que corresponde ahora a los revolucionarios continuar el trabajo que inició su hermano para garantizar una nación libre y soberana. “Hoy más que nunca debemos estar unidos, sin olvidar la premisa de lucha, batalla y victoria. Debemos seguir haciendo Revolución y defender el legado que nos dejó Hugo Chávez”, resaltó.

Finalizó su intervención con un nuevo llamado a la unidad, como lo hiciera el Comandante Eterno en su última aparición pública. “Chávez seguirá vivo porque sigue siendo el corazón de la patria”, dijo.